A la hora de evaluar nuestras finanzas, y saber si lo estamos haciendo bien la realidad es que aunque no existe un medidor único para todos, y saber si vamos por buen camino, también es cierto que la educación financiera que tenemos se mide no sólo por los resultados sino también por nuestros hábitos en nuestro día a día.
En la escuela nadie nos enseño a administrar el dinero, no es su culpa tampoco, pues vivimos en un sistema que no toma en consideración el inconveniente a largo plazo que eso podría ocasionarnos, y no sólo en los aspectos de nuestras finanzas personales, sino también en la forma en la que nos relacionamos con los demás.
Ahora bien, si es tu responsabilidad cambiar esa situación, y las acciones que tomaste hace uno o dos años, hoy se ven reflejadas en tu vida, para bien o para mal, depende.
Tu educación financiera se pone en evidencia a la hora de tomar decisiones, también involucra tu capacidad para comprender y ser consciente de que haces con tu dinero y cómo interpretas tu relación con él.
Soy consciente de que no siempre valoramos nuestros logros de forma adecuada, siempre queremos más y siempre creemos que no es suficiente, o que no es para tanto, y aunque parece algo único, la ciencia de la conducta lo define como; el síndrome del impostor. Y es una condición que todos sufrimos.
Señales que demuestran que has aumentado tu educación financiera
Quiero compartir algunos hábitos y actitudes que demuestran que vas mejor de lo que crees con tus finanzas, y que el síndrome del impostor que a todos nos afecta, no te haga tanto daño, quizás. La razón principal es autoevaluarnos y ser críticos con nuestra forma de actuar, eso en busca por supuesto de mejorar nuestro bienestar económico, y metal.
Existen cosas, señales, indicios que pueden sugerir una mejor relación con el dinero, es algo que se ve con el tiempo por supuesto, valoremos eso.
Siempre estás aprendiendo
Comprendes que no lo sabes todo, y que tus finanzas personales son un eje fundamental de tu vida que afecta más allá del dinero, por ende buscas optimizar, aprender y comprender el uso del dinero en tu vida diaria.
Tienes un objetivo
Sabes exactamente lo que quieres, y es qué con tu educación has adquirido el ver más allá del horizonte; tener un fin en mente primero que todo, así sea algo simple cómo tener tu fondo de emergencias, o planificar tus ahorros con el fin de irte de vacaciones el próximo año, una meta favorece tus finanzas, y lo sabes. Ya piensas en tu futuro financiero, y tienes en tu haber el compromiso de ser una mejor versión de ti mismo en todos los sentidos.
Tienes control de tus gastos
Las finanzas se componen de diferentes partes para ser saludables, y con tu educación sabes que gran parte del problema que todos presentamos a la hora de administrar el dinero es por el gasto, básicamente de ahí parte todo y estoy convencido, debemos aprender a gastar y lo has comprendido del todo, por ello procuras gastar tu dinero de forma eficiente.
Hiciste un presupuesto ideal para ti
Conociendo que cada persona es diferente, conociendo que el mundo es inmenso has realizado la tarea con tus conocimientos, y has hecho un presupuesto ideal para ti, sin dejarte llevar por consejos ajenos a tu realidad, sino conociendo tus detalles personales en cuanto al dinero, tus gustos, tus hábitos, y por supuesto tus objetivos, por eso aunque existen cientos o miles de formas de hacer un presupuesto haz hecho uno que se adapta a ti.
Ahorras mes a mes
La caracteristica principal de todo ser humano que lleva en armonía sus finanzas personales y su vida diaria, es el hecho de que cada mes le sobra dinero, y una parte de ese dinero lo guarda, con un objetivo en mente, ahorrar no basta y no bastará pero es fundamental en las finanzas, y tú lo haces, vas bien.
Tienes control de tus deudas
No tomas deudas a la ligera, aunque algo este en oferta no buscas adquirir ese producto o servicio, sino más bien analizas las situación, haces los cálculos o matemáticas necesarias y tomas una decisión que no te afecte. Porque sabes que cada acción que tomas con tu dinero, tiene una consecuencia, y eso lo lograste con tu educación, seal cual sea el nivel en que estés, si piensas antes de actuar estás en un lugar de conocimiento y conciencia con el dinero favorable para tu yo presente, y tu yo futuro.
Tienes seguros adecuados
Sabes que probablemente no te pase nada, y también sabes que el dicho aquel «es mejor prevenir que lamentar» es tan cierto cómo que el mar incommensurable, por ello aprendiste a adquirir tu seguro de vida, tu seguro de salud y otros tipos de salvaguardas antes situaciones que no quieres que se presenten pero si lo hacen por causas ajenas a tu voluntad podrías asumir dicha responsabilidad de una forma adecuada.
Eres consciente y libre con tus finanzas
Estás tranquilo, y tu relación con el dinero no se siente estresante, no tienes ansiedad, al menos no cómo antes y no en un nivel poco saludable -vaya! que a veces sí que son necesarias para sacarte del hoyo – sientes la plenitud, sientes una paz al saber que tú tienes control de tu economía personal, y que aún teniendo cosas por aprender, sientes tener control sobre tu vida financiera, tienes la consciencia para saber que puedes obtener mejores resultados, y estas dispuesto a lograrlos.
Gastas el dinero sin remordimiento, y eres consciente de las consecuencias de tus actos, inviertes el dinero porqué sabes que pierde su valor con el tiempo, y aprecias, agradeces por lo que tienes. Eres libre!
Nos vemos, o nos leemos, palabra. — Daury